PDI desbarata banda que usaba app de citas para secuestrar

La Policía de Investigaciones (PDI) detuvo a ocho integrantes de una organización delictual dedicada al secuestro extorsivo, cuyo método consistía en captar a sus víctimas a través de una aplicación de citas. Los delincuentes concertaban encuentros, ofrecían transporte y luego retenían a los afectados para robar sus pertenencias y exigir dinero por su liberación.

Secuestraban usando aplicación de citas

Según detalló el subprefecto Claudio Caro, jefe subrogante de la BIPE Antisecuestros Metropolitana, los criminales contactaban a sus víctimas mediante una app de citas y les ofrecían trasladarlas al punto de encuentro. Uno de los delincuentes conducía el vehículo, pero en medio del trayecto se detenía en un lugar de baja visibilidad y poco tránsito, donde otros miembros de la banda subían a la fuerza al automóvil.

En ese momento, los secuestradores golpeaban e intimidaban a las víctimas, robaban sus pertenencias, especialmente celulares, y luego utilizaban estos dispositivos para extorsionar a familiares y vaciar sus cuentas bancarias. “Los imputados pedían dinero para liberar a los afectados”, explicó Caro, señalando que una de las víctimas tuvo que pagar cerca de $6 millones para recuperar su libertad.

Una vez cometido el delito, las personas secuestradas eran abandonadas en distintos puntos de la Región Metropolitana.

Las detenciones se llevaron a cabo el miércoles, en un operativo en el que se arrestó a seis hombres y dos mujeres, quienes operaban principalmente en Independencia y Recoleta. Estos imputados se suman a otros dos sujetos ya detenidos y en prisión preventiva, en el marco de la misma investigación.

La fiscal Paola Salcedo, de la Fiscalía ECOH, indicó que los ocho detenidos fueron formalizados por secuestro extorsivo, robo con violencia e intimidación, delitos que afectaron a tres víctimas.

El tribunal determinó que todos los imputados quedaran en prisión preventiva, mientras que los adolescentes involucrados fueron enviados a internación provisoria.

Este caso pone en evidencia la creciente utilización de nuevas tecnologías por parte de bandas criminales y la necesidad de extremar precauciones al concertar encuentros a través de aplicaciones móviles.